La creciente incorporación de sistemas de Inteligencia Artificial (IA) en las organizaciones, ha llevado a extender las características del modelo de calidad de la norma ISO/IEC 25010 para incluir aquellos aspectos adicionales que presentan estos sistemas.

Los cambios que presenta la norma ISO/IEC 25059 en lo que respecta a la calidad de producto son las siguientes:

La Adecuación Funcional añade la subcaracterística:

• Adaptabilidad Funcional. Grado en que un sistema de IA puede adquirir con precisión información de datos, o el resultado de acciones anteriores, y utilizar esa información en futuras predicciones.

En cuanto a la corrección funcional advierte que los métodos de aprendizaje automático no suelen proporcionar una corrección funcional en todas las circunstancias observadas, por lo que es necesario medir la corrección y la incorrección cuidadosamente.

La Capacidad de Interacción añade dos subcaracterísticas:

• Controlabilidad del Usuario. Grado en que un usuario puede intervenir adecuadamente en el funcionamiento de un sistema de IA de manera oportuna.
• Transparencia. Grado de comunicación de la información adecuada sobre el sistema de IA a los stakeholders.

La Fiabilidad añade una subcaracterística:

• Robustez. Grado en que un sistema de IA puede mantener su nivel de desempeño en cualquier circunstancia.

La Seguridad añade una subcaracterística:

• Intervenibilidad. Grado en que un operador puede intervenir en el funcionamiento de un sistema de IA de manera oportuna para evitar daños o peligros.